Es por esto que hay situaciones en que es muy importante comunicarse de forma extremadamente precisa; por ejemplo, en relaciones íntimas o en acuerdos de negocios, querremos estar seguros de que la otra persona comparte el significado.
Es por eso que el Metamodelo de PNL nos invita a explorar más a fondo la estructura de la experiencia interna de una persona, para poder identificar y aclarar cualquier distorsión o generalización que pueda estar afectando su comunicación.
Nos permite entender a los demás y empatizar con ellos, comprendiendo cómo perciben el mundo y cómo interpretan la realidad desde sus propias experiencias.
Al dominar el metamodelo, se empieza a usar el lenguaje con mayor intención y claridad. En consecuencia, se reducen los malentendidos y se mejora la asertividad en cualquier ámbito, desde la vida particular hasta el mundo empresarial.
Por lo tanto, el lenguaje que usamos moldea nuestra percepción de la realidad. Así, cada palabra que elegimos conlleva una carga emocional y una serie de asociaciones que influyen en nuestra comprensión del mundo que nos rodea.
El comportamiento incluye tanto las acciones observables como las respuestas emocionales, y está en constante interacción con el entorno y con los procesos mentales.
Por ejemplo, al describir un restaurante, alguien puede generalizar al decir que “la comida es buena” en lugar de describir cada plato individualmente.
De esta manera, este tipo de preguntas devuelve responsabilidad emocional al hablante, algo poderoso para el autoconocimiento.
Es importante encontrar un equilibrio entre necesidad y posibilidad. Al utilizar ambos operadores modales conscientemente, podemos:
La concept al revisar las violaciones al lenguaje es poder comunicarnos more info de manera más prolija y completa. Esto lo logramos de dos maneras.
El Metamodelo de la PNL nos proporciona preguntas específicas para recuperar el proceso detrás de la estructura de superficie. Al hacer esto, podemos identificar las generalizaciones, distorsiones y omisiones que pueden estar limitando la comprensión de la situación y, por lo tanto, podemos expandir nuestra comprensión y nuestro “mapa del mundo” de la misma.
En PNL se considera que los hechos o la realidad externa son filtrados por la experiencia interna de cada persona y que, por lo tanto, la forma en que se interpretan y se representan en nuestra mente puede variar de una persona a otra.
Con el resto de las personas debemos tener en cuenta lo poderoso que puede ser. Por tanto, debemos dar prioridad a la otra persona y solo utilizarlo cuando tenga claro un objetivo y ante todo desde el respeto a la otra persona.
Es importante asegurarnos decir lo que querimos decir, comprender lo que quieren decir los demás y permitir a los demás que comprendan lo que quieren decir.